
Frente a los 555 mil mexicanas y mexicanos que perdieron su empleo formal, como lo anunció el Instituto Mexicano del Seguro Social esta semana, más el 55% de la población que trabaja en la informalidad, es incierto el impacto que tendrá la contingencia. Hasta ahora, el CONEVAL en su estudio “La política social en el contexto de la pandemia por el virus SARS-CoV-2 (COVID-19) en México”, estima que se podrían generar hasta 10 millones de personas más en situación de pobreza y entre 6 y 10 millones más en pobreza extrema.
“Los programas del Gobierno Federal no están diseñados para atender los efectos de esta crisis. Hay alrededor de 32 millones de personas que no están contempladas como beneficiarias de dichos programas y lo que esos programas ofrecen es insuficiente para afrontar la contingencia”, dijo el senador a través de una conferencia virtual.
Movimiento Ciudadano es la primera fuerza política que pone sobre el papel el proyecto de Ingreso Mínimo Vital, que plantea:
5- El Poder Ejecutivo, a través de la Secretaría de Bienestar, ejecutaría esta Ley; el INEGI contribuye con la declaración de situación especial y, junto con el IMSS, establece los grupos ocupacionales; mientras que el CONEVAL evaluaría y vigilaría el programa.
Para Movimiento Ciudadano, el Ingreso Mínimo Vital es un derecho que para hacerlo realidad requiere del más amplio consenso. Para abrir el debate y sumar voces, enviaremos la propuesta a distintos actores sociales, políticos, económicos y académicos, realizaremos seminarios virtuales para perfeccionar esta iniciativa con carácter urgente. Además, llevamos la propuesta a la plataforma change.org para sumar el apoyo de los ciudadanos (https://www.change.org/